El término feminismo en sí puede conceptualizarse de diversas maneras, pero siempre
manteniendo la misma visión y objetivo, que es justamente dejar establecido pero sobre todo bien
claro que este movimiento ha sido creado con la finalidad de liberar a las mujeres del sometimiento
ejercido sobre ellas por parte de los hombres desde tiempos pasados.
Por su parte la escritora y psicóloga Victoria Sau Sánchez quien fue mayormente
conocida y catalogada por su labor activista dentro de la política feminista, siendo ella uno de
los rostros más significativos de dicho movimiento dentro de la cultura española, en su
Diccionario ideológico feminista, VOL: I, Delimita al
feminismo
como un «movimiento social y político» que sentó sus primeras bases a finales del siglo XVIII,
aunque sin darse a conocer como tal, intentando realzar la voz de todas las mujeres, como una
asociación comunal ante los abusos, sometimiento y autoritarismo del cual han sido víctimas por
parte de los hombres, quienes se han aprovechado del poder otorgado por la sociedad, dando el
titulo de jefe dentro del seno familiar.
Aunque sin olvidar que desde tiempos muy remotos el hombre ha sido considerado
el ser con mayor influencia a lo largo de la evolución, refiriéndonos a las etapas históricas por
las cuales ha atravesado el modelo de producción, por esta razón es que las mujeres han tenido las
ansias y necesidad de manifestarse ante estos actos de desigualdad, con el único propósito de
concederle la tan anhelada autonomía, al tan llamado sexo débil, con toda la reforma e innovación
que advierte necesitar la sociedad.
Por otro lado el «feminismo» es también valorado como un conjunto diverso
enlazado entre sí, puesto que no va en busca de la igualdad solo de palabra sino también de hecho
abarcando ideologías, movimientos políticos, culturales y económicos, teniendo como finalidad
principal, a la
igualdad de género
sumándole la igualdad de derechos humanos entre hombres y mujeres, de esa misma manera debatir, el
sometimiento y abuso de los hombres ante las mujeres y la retribución de los roles con mayor
responsabilidad y respeto por parte de los demás miembros de la sociedad determinados de acuerdo al
género al que pertenece el individuo dando preferencia sin duda al sexo masculino.
En países innovadores y desarrollados este movimiento ha dejado de ser
considerado como un simple componente ideológico-social, comprendido como una lucha con rostro de
protesta, exigencias y reclamaciones, haciéndose presente por medio de marchas colectivas de un
mismo género acompañadas de carteles, letreros y pancartas, mostrando su inconformidad a través de
simbologías y gráficos, para transformarse en un método disciplinario, conformado por un
pasado histórico
de hechos, pasajes y escritos trascendentales, por
distintas corrientes
metodológicas. A pesar de ello en países que aun se encuentran en proceso de desarrollo, todavía
conservan el método tradicional de alzar la voz para hacerse escuchar ante las injusticias y la
desigualdad que aun existe en la actualidad del mundo contemporáneo entre hombre y mujer, el cual,
consta precisamente, de manifestaciones, artículos escritos, encuentros masivos, llegando hasta las
demandas todo con el fuerte propósito de hacer visible ante los ojos de todos la discrepancia que
aunque no lo parezca suele ser evidente por parte de la mitad de los ciudadanos ante los que están
en búsqueda de la equidad de género pero sobre todo justicia e identidad propia.
El feminismo por su parte es también una teoría crítica teniendo raíz y
procedencia ideológica dentro de la época de la ilustración, pero esto no quiere decir que la
ilustración es propiamente
feminista
sino más bien que se constituye como un plano aspiracional de pensamiento liberador, alrededor de
un contexto con ideas de ecuanimidad, paridad y homogeneidad acompañado de una dosis de soberanía e
independencia. Como corriente y tendencia de transformación dentro de la sociedad, tiene una
preferencia de dominio ante la estructura en la que se define la realidad y en la disertación
científica. Cuando el movimiento logra obtener trascendencia dentro del contexto académico se va
produciendo un nuevo elemento ideológico elaborado bajo una nueva hipótesis con fundamentos
teóricos aptos y exclusivos.
Desde su apreciación como protesta y marcha social el feminismo se conoce como
una evolución con una serie de transformaciones de las cuales se derivan de diversas facetas o
etapas las cuales son llamadas «olas del feminismo»,
es importante decir que la historia y el contexto del feminismo estadounidense no es la misma a la
del análisis y los estudios que existen dentro de la cultura europea, entre los cuales destacan por
su relevancia los que han sido elaborados en el idioma español. En cada una de las etapas u «olas»
se han creado pensamientos, términos, metodologías, teorías, estrategias, actos, de diversas
corrientes tal como lo es la teoría feminista que ha generado la visión e intervención de otras
disciplinas como, la geografía feminista, la
historia feminista
o el análisis y estudios de género. El feminismo busca evolucionar y transformar las relaciones de
poder, por esta razón ejecuta criticas en términos feministas de la sociedad, critica que se
encuentra con una problemática directa con la percepción androcéntrica la cual hace referencia al
ejercicio lucido o no de conceder a los hombres o a la opinión del género masculino una posición
nuclear e importante ante la inherente visión del mundo incluso de la cultura y la historia, a la
cual se enfrenta y por consecuencia se encuentra con la necesidad de replicar y arremeter ante esta
acción con la único propósito de obtener la tan anhelada meta y justicia, pero lo más importante la
tan ambicionada libertad.
Pero no hay que olvidar que este movimiento no debe ser considerado solamente en
singular puesto que dentro del mismo existen diversas clases de feminismo tales como; feminismo de
la igualdad,
ecofeminismo,
feminismo cultural, feminismo liberal,
feminismo radical,
feminismo separatista,
anarcofeminismo,
feminismo amazonas,
feminismo de la diferencia, feminismo islámico,
feminismo lésbico,
feminismo individualista,
feminismo marxista,
feminismo filosófico y el transfeminismo, con toda esta variedad que derivan del término nos damos
cuenta que es necesario replantarse el termino y hablar no solo de feminismo en particular sino
mejor dicho «feminismos» manejando la pluralidad, como un conjunto compuesto de diversas
agrupaciones que comparten una misma ideología en un principio pero empleándola para fines
múltiples, pero siempre teniendo como intención principal la igualdad entre ambos sexos (masculino
y femenino).
Entre las muchas otras definiciones que existen haciendo referencia al feminismo
surge una que no debemos de olvidar que es aquella que está establecida en el Diccionario de la
lengua española, en donde dice textualmente que; el feminismo se trata de una «doctrina social
favorable a la mujer a quien concede capacidad y derechos reservados antes a los varones»
mientras tanto como segunda conceptualización puntualiza que, «es el movimiento que exige para
las mujeres iguales derechos que para los varones». Cabe destacar que gracias a la influencia y
ascendencia que ha surgido dentro del
movimiento feminista
se han obtenido grandes ventajas pero ante todo beneficios para las mujeres como lo son; el derecho
y acceso a la formación académica es decir, a la educación, el ejercicio al
derecho del voto
o elección, ya sea de manera activa o pasiva, el amparo y seguridad a sus derechos sexuales y
reproductivos, entre otros que constituyen los principios de la ciudadanía dentro de una ideología
nueva y democrática.
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